El yogur es uno de esos alimentos que
nunca faltan en cualquier casa y que a casi todo el mundo gusta. Por eso, hoy
queremos mostrarte la manera en que puedes hacer el tuyo propio, un yogur
casero que no tiene nada que ver con los que venden en las grandes superficies,
sin los conservantes y el resto de compuestos que terminan por
desvirtuar completamente el sabor del yogur de toda la vida.
Además, lo mejor de esta receta es que
no precisa de yogurtera, sino que se hace siguiendo el método tradicional.
Pero no por ello penséis que tendréis que estar largas horas en la cocina preparándolo,
pues es un proceso que no os llevará más de una hora, más unas 7 u
8 de espera. Por ello, lo más recomendable es que lo hagas por la
noche para que al día siguiente esté listo. Lo único que vamos a
necesitar es:
– 1 yogur natural
– 1 litro de leche
– 1 olla
– 1 batidora o varillas de cocina
– 1 termo
– 1 termómetro de cocina (opcional)
– 1 litro de leche
– 1 olla
– 1 batidora o varillas de cocina
– 1 termo
– 1 termómetro de cocina (opcional)
Ahora veamos cómo se hace:
Calienta el litro de leche en una olla a
45ºC, removiendo para que esté igual de caliente por todos sitios. Puedes
calcular fácilmente la temperatura con el termómetro, pero si no tienes espera
a que la leche comience a echar humo y a levantar un poquito
Este es el momento en el que debes
añadir el yogur natural a la leche. Después utiliza las varillas de cocina para
removerlo bien y para que quede todo uniforme. También puedes utilizar una
batidora eléctrica para ir más rápido
Después, vierte la mezcla en un termo y
tápalo bien para que el calor no se escape. Deja reposar durante 7 u 8 horas
También puedes dividir la masa en
vasitos de barro y taparlos con papel film. Una vez lo tengas, arropa los
vasitos con un paño grueso para conservar lo mejor posible el calor. Deja
reposar durante 7 u 8 horas
Transcurrido el tiempo, ¡nuestro yogur
casero ya estará listo! Si preferís una textura más consistente, tan solo
tenéis que dejarlo reposar un par de horas más
Cuando tengas tu yogur listo, mételo en
la nevera hasta el momento de la consumición, donde aguantará perfectamente
de 8 a 10 días. Ni qué decir tiene que cuando tengáis este yogur no
tendréis que comprar otro para hacer más, ya que el que acabamos de hacer nos
sirve perfectamente para repetir la receta. Esperamos que os haya sido de gran
utilidad.
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